Consiste en un conjunto de acciones y decisiones responsables respecto al uso que los bancos hacen del dinero que se les confía. Para nosotros, el uso responsable del dinero es una oportunidad para crear una sociedad más sostenible. Y lo hacemos, por un lado, concediendo préstamos a empresas y organizaciones sostenibles que trabajan en los ámbitos social, cultural y medioambiental. Y por otro, informando con total transparencia de los proyectos que financiamos para que nuestros clientes conozcan el destino de sus ahorros.
Hoy en día hay muchas opciones para gestionar el dinero de esta forma, además de la banca ética. A través del crowdfunding, la economía colaborativa, el apoyo a causas sociales…
Esto requiere de personas que tomen las riendas y sean responsables, porque cada decisión tiene una consecuencia.